Desde hace años son bien conocidos los beneficios del consumo de lácteos en nuestra dieta. En general, se suelen recomendar la ingesta de entre 2-4 raciones de lácteos al día, pudiendo aumentar su consumo en etapas como la gestación, lactancia materna y menopausia.

Muchos estudios han relacionado el consumo de lácteos con:

• Menor riesgo de obesidad
• Ayudan a controlar la tensión arterial
• Menor incidencia de Diabetes tipo II
• Reducción de colesterol LDL (malo) y aumento de colesterol HDL (bueno)

Aunque no es un alimento imprescindible (se puede seguir una alimentación exenta de lácteos sin tener déficit de calcio) es aconsejable su consumo ya que puede ser complicado llegar a las necesidades de calcio (sobre todo en etapas de la vida en las cuales está aumentado su consumo)

Una nueva investigación demuestra que una dieta rica en productos lácteos parece relacionarse con menor riesgo a ciertas enfermedades, en especial, prevención de patologías como diabetes e hipertensión arterial.

El estudio ha sido realizado por un equipo internacional de investigadores en el que se analizó a 147.812 participantes de entre 35 y 70 años de 21 países diferentes (entre ellos Argentina, Brasil, Canadá, Chile, China, Colombia, India, Estados unidos… entre otros)

Los participantes debían rellenar cuestionarios de frecuencia de consumo de lácteos en el último año. Los productos lácteos incluían: leche, yogur, quesos, platos preparados a base de quesos, cremas de leche… y todos sus derivados excepto la mantequilla (ya que es la grasa habitual de consumo en algunos países)

Se analizaron factores médicos como el consumo de fármacos, tabaquismo, peso, talla, circunferencia de la cintura, presión arterial y glucosa basal. Se les realizó un seguimiento de estos parámetros durante 9 años y se les hizo seguimiento médico para valorar como modificaban los parámetros con el consumo de lácteos a diario.

Los resultados mostraron que el consumo de 2 raciones de lácteos al día se relaciona con un menor riesgo de aparición de diabetes tipo II e hipertensión arterial entre un 11-12% menos y 24% menos de riesgo de aparición de Síndrome metabólico.

También se concluyó que el consumo de 3 raciones de lácteos/día se reducían las mismas patologías en un 13-14% menos. Es decir, a mayor consumo de lácteos, menor riesgo de aparición de diabetes tipo II e Hipertensión arterial.

Estas asociaciones se relacionaron más con el consumo de lácteos enteros o semigrasos que con el consumo de lácteos desnatados. Es más, el consumo de lácteos bajos en grasa no se asoció con una menor prevalencia del síndrome metabólico.

Los investigadores concluyen que el estudio realizado, es un estudio observacional  y que no podemos relacionar una causa-efecto directa. Sin embargo, los hallazgos del estudio se relacionan con muchos otros, en los cuales se ha visto clara la relación del consumo de lácteos enteros con la prevención de ciertas patologías como la hipertensión, diabetes y enfermedades cardiovasculares en general.

Si disfrutas comiendo lácteos y encima eres que aquellos/as que te gusta consumir lácteos enteros, pueden ser un aliado para tu salud, siempre y cuando valoremos otros aspectos médicos.

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